KUTXA BELTZA: Txuma Murugarren (sala superior)
Dia/Hora
23/02/2017
Jueves
20:00
En la sala superior. Las puertas se abrirán a las 19:30.
Anticipada: 6 € + gastos de distribución (Kafe Antzokia, www.kafeantzokia.eus, Ticketea)
Taquilla: 8 €
Kutxa Beltza
TXUMA MURUGARREN
Presentando su nuevo album «Zerbait ari da gertatzen, hor».
Aún queriendo, sería difícil no prestar atención a la escritura sugerente de Murugarren, a esas letras que nos cuentas historias tan identificables. Estos tiempos tan oscuros, tan de zozobra, probablemente le hayan allanado el camino de la escritura, pero él tiene la capacidad de encontrar las palabras, como si le aparecieran en el camino. Así dice el comienzo de la canción «Apurrak galtzetan»: “Ya sabes cuál es el camino más tortuoso, sabes dónde se esconde agazapado el dolor, sabes dónde persiste la fiebre. En los momentos confusos que siguen al accidente el alma te abandona como si escapase de un incendio, no hay agua, el corazón se ha ahogado”. Y así canta en «Uda usaina»: “… Tú no sientes lo mismo? No hemos encontrado nuestro lugar. Quiero decir que solo nos hemos dado soledad, escondidos en la habitación de atrás creyendo que la cosecha sería buena”. Y así termina «Atzoko zerraldoa»: “Te busco desde la ventana, y ya no estás, te ha comido la noche, y en está mañana tullida pájaros extraños te llevan, volando”.
Pero no todo es palabra. Sumémosle la voz semi-rota y el cantar áspero de Murugarren, el tempo del fraseo que es única y distinguidamente suyo, y el sonido compacto de la banda, una banda que emerge más potente que nunca —la razón podría ser el haber grabado todos juntos y a la vez—. El resultado, irremediablemente es, cuando menos, atractivo.
El autor ha sabido hacer suyo el terreno del pop y del rock de medio tempo; pero existen muchos matices. En algunas ocasiones se asoma al country-folk anglosajón; redondos resultan los dúos que comparte con Gaizka Isunza (Audience), por ejemplo en la bella «Dirua falta zaigu»: “ …pero el agua se escurre por las grietas, se seca la tierra, las promesas también, y aunque hasta ahora no me haya dado cuenta, quizá sea el momento de marcharse” dicen. Tiene un ritmo más vivo —el más vivo del disco—la pieza que da título al disco, en la que describe algunas escenas en tono jocoso y crítico ala vez. “…Elliot Smith está cantando en el club, hay humo alrededor, siempre humo, y el olor de la gente, el olor de la realidad, el olor del padre perdido, el de las manos de la madre, y mientras piensas en eso el camarero se acerca jocoso: -Hoy no va a tocar el grupo – dice – el cantante se ha emborrachado y se ha partido la cabeza contra el lavabo mientras vomitaba. Es cierto, todavía hay sangre, pasa si quieres verlo”. Reminiscencias del power-pop y el post-rock («Apurrak galtzetan»), un blues actualizado («Bagoaz hemendik»), pop-rock con tintes de club de ciudad («Egun handia» y «Uda usaina»; en ambos con participación de Isunza y un bajo e intrumentos potentes de viento en la primera). Y el pop sencillo de la útima cancion, Poz biribila, en la que el ritmo ágil hace un contraste lúcido con la melancolía de la letra: “Quiero caminos solitarios para aprender a escapar, a través de los estrechos pasos de monte, a la tarde, cuando la luz se difumina”.